Las Tumbonas Titanic, un clásico del mobiliario de exteriores

Tumbona original del Maritim Museum of  Atlantic
(Halifax, Nueva Escocia, EEUU)

Aunque el verano esté dando sus últimos coletazos y hayamos vuelto a la rutina, siempre podemos encontrar un momento para sentarnos en nuestra terraza, patio o porche y disfrutar de un rato de silencio, tranquilidad y descanso.

Por eso mismo, seguro que estáis conmigo, nunca es un buen momento para guardar la tumbona, y más, si es plegable. ¡Nunca sabes cuando la necesitarás! En este caso, os hablamos de un modelo plegable muy especial y simbólico:  la Tumbona Titanic.

Los historiadores datan su aparición a mediados del siglo XIX. Estas tumbonas clásicas de madera de teca se diseñaron para amueblar las estancias exteriores de las cubiertas de primera clase de barcos de pasajeros y transatlánticos.

En aquella época, ya se utilizaban tumbonas de hierro forjado en las galerías de hoteles, balnearios o mansiones. Cuando se construyeron los primeros buques de pasajeros se quiso trasladar el concepto de galería, a las cubiertas del barco. De igual manera, este emplazamiento era utilizado por los huéspedes como zona de paseo o de descanso, desde la cual, establecían relaciones sociales, disfrutaban de un libro y un té, o leían el periódico de la mañana.

Fotograma de la película 'Titanic' (1997, James Cameron) con los dos protagonistas

Para los transatlánticos ya no servían las tumbonas de hierro pintado por dos razones. En primer lugar, éstas no podían plegarse y eran muy pesadas. En el contexto para el cual fueron ideadas en un principio esto no suponía un problema, pero en un barco, donde el tránsito de pasajeros, la seguridad y la organización son algo fundamental, tenían que optar por algo plegable, ligero y fácilmente transportable. En segundo lugar, el mobiliario de hierro se hubiera acabado oxidando y estropeando a causa de la humedad y el salitre.

Fotograma de la película 'Titanic' (1997,  James Cameron)

Es así como decidieron crear una tumbona de madera de teca (perfecta para exteriores y resistente a factores climáticos), plegable y articulada con herrajes de metal con un tratamiento antioxidante. De esta forma, nace este modelo de tumbona con respaldo de barrotes, asiento de rejilla y reposapiés, que se pliega en zig zag: primero el cuerpo central (con patas tijera) y luego la extensión y sus patas.

Tumbona expuesta en  la exposición  'Titanic Experience' de Orlando (EEUU)

Concretamente, tal como podemos apreciar en estas fotografías antiguas, cuando estaban desocupadas eran plegadas y colocadas junto a la pared o en un rincón, con el fin de ahorrar espacio y optimizar el tránsito de pasajeros.

Fotografía original del Titanic - Galería de la cubierta superior

¿Pero porque se las llama 'Tumbonas Titanic'? Aunque es probable que tuvieran otro nombre o se las llamara comúnmente, 'tumbonas de cubierta', reciben este nombre por una razón anecdótica. Algunos de los supervivientes de la tragedia del Titanic narran que estos muebles seguían flotando tras el hundimiento. Cuando otros barcos acudieron a su rescate, se subieron junto a los pasajeros, algunos de los ejemplares encontrados. Desde ese momento, y debido a su simbolismo, estas tumbonas empezaron a llevar tal sobrenombre, a modo de recuerdo.

Fotografías original del Titanic - Cubierta superior

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Tumbona de jardín Nerea - Ámbar Muebles