jueves, 12 de marzo de 2015

La silla Panton un icono Pop Art de total actualidad

Silla Panton en rojo
Muchos la consideran la silla más sexy y sinuosa del mercado. La 'S Chair' es de sobra conocida por todo el mundo como una de las piezas clave del diseño moderno, junto a las de los Eames, Mies Van Der Rohe o Saarinen, por ejemplo.

¿Pero por qué muchos la recordamos como un icono de sensualidad? Primero, por sus formas redondeadas y anatómicas, y segundo, que no menos importante, porque sobre ella posó desnuda una de las top model más prestigiosas de las últimas décadas. Hablamos de la fotografía de portada del número de enero de 1995 de la edición británica de la revista Vogue, protagonizada por esta silla y Kate Moss.

A parte de este hecho anecdótico, la conocida popularmente como Panton Chair tiene una historia muy similar a la de las creaciones de algunos de los contemporáneos y colegas de Verner Panton, su diseñador.


Para una mesa de desayuno
Panton, originalmente, diseñó hasta silla y la realizó en madera laminada, pero esta no se adecuaba a la idea, ni al tipo de productos que él quería lanzar, más en la sintonía del arte pop americano. No fue hasta un par de años después de crear el primer prototipo, hacia el año 1960, cuando le surgió la oportunidad de visitar una fábrica de cascos de seguridad y cubos de plástico.

Pensó en crear una pieza resistente, con un diseño muy original y totalmente ergonómico, que se ajustará a las formas de espalda, trasero y piernas, y que además no tuviera patatas traseras, ni piezas extra. Quería producir una silla moldeada de una sola pieza, por eso, no empezó a producirla hasta que encontró a la persona con los conocimientos adecuados para ejecutarla.

Para ello, a finales del año 1962 visitó las fabricas de Vitra, que por aquel entonces se encargaba de producir el mobiliario diseñado por Herman Miller, bajo licencia. 

Como silla de escritorio
Tras años de experimentación con distintos materiales, en 1967 consiguieron producir el primer prototipo en fibra de vidrio reforzada con poliester. Este primer intento, resultó ser demasiado pesado, con lo que decidieron reducir su grosor sin que esto afectara a su estabilidad.

De esa manera, fue en 1968 cuando salió al mercado la versión final, firmada por Vitra, bajo la marca y número de serie de Herman Miller & Co., y barnizada en siete colores a elegir. Pronto, esta pieza ganó popularidad y se convirtió en un icono del arte pop.

Vitra y Bayer Leverkusen, dos de los fabricantes que trabajaban para la firma Herman Miller, siguieron experimentando con los materiales, haciendo pruebas con esta y otras piezas, comercializando cada vez sillas más resistentes, ligeras y económicas (pues al cambiar los materiales, se reducían costes y tiempos de producción).

Desde 1990 (momento en el que volvió a ponerse de moda) se está produciendo en masa una versión realizada en espuma de poliuretano de alta resistencia.

Hace un tiempo, Vitra sacaba al mercado una versión más pequeña para niños,  en colores muy divertidos y vivos, perfectos para su dormitorio o rincón de juegos. Últimamente, nos encontramos infinidad de imágenes de ambientes en las que una silla Panton se coloca como silla de escritorio o de comedor en estancias de cualquier estilo decorativo. Bien podemos ver una Panton, combinada con una mesa rústica, vintage o moderna. Se trata de una pieza de diseño moderno que aportará un aire divertido e informal a cualquier espacio. Además, una de sus principales ventajas, además de las mencionadas anteriormente, es que puede ser apilada con otras del mismo modelo, pues se ajustan perfectamente entre ellas.

Esta icónica silla está disponible en nuestro catálogo online, en color blanco y negro.

La 'Panton Chair Kids', hecha a medida para los pequeños de la casa

No hay comentarios:

Publicar un comentario